La nona y las voces
Bien se dice que hay dos tipos de
conocimiento, por intuición o por racionalización. En el primero uno se escucha
a uno, lo que uno mismo se dice, y se hace caso.
Bueno, en casa lo que se sufre es lo que se dice de una sordera interna.
No es escuchan. Claro, negados como fueron siempre para las
ampliaciones y las ayudas, con eso de no escucharse a sí mismo, siempre
se jactaron de que no escuchaban voces “Los que se escuchan a sí mismos, escuchan
voces” “¿Y la voz de la conciencia que es? Una voz” Y aun
en algún momento lo llevaron más lejos, y eran de apagar la radio, más que nada
por eso de no escuchar voces.
Y acá viene la cuestión de la nona. Porque
la nona decía que escuchaba voces, la voz de Fioravamti, Víctor Hugo, la voz de
Gardel cantando un tango. Y con esa problemática se presentó al
psicólogo “Escucho voces, pero son voces ordenadas, Fernando Bravo de una a
cuatro de la tarde. Víctor Hugo Morales entre las nueve y las doce. Ya arranco
temprano, escuchando a Magdalena Ruiz Guiñasú. Eso me deja tranquila, son voces
ordenadas. Siempre a la misma hora, las mismas voces, y te informan” Le dijo .No pudo el psicólogo aclararle
que escucha a AM Continental que estaba puesta en la cocina, porque la Nona le
aventuro “O sufro algún tipo de trastorno, o soy un elegida, que me están transmitiendo
cosas. Por ejemplo que está trabado el transito a la altura del puente Pueyrredon
por un corte de calle” Porque bien sabia este psicólogo que en casa todos necesitan
tener algún problema especial. Y la nona, una tana de las de antes, no tenía
ninguno. Así empezó la relación entre el terapeuta de la familia y la nona. Ella
lo llamaba y le decía “Fui a la cancha y escuche una voz, que decía Cambio En
Argentinos, sale Cambiazo, entre Giménez” Y él no le decía que era la voz del
estadio.
Ahí sigue la nona en casa, escuchando
voces. Ahora son un poco distintas, lo dijo ella “Algo están pasando, las voces
están desordenadas, escucho voces, pero son otras voces” Alguien le corrió el
dial de la radio y está escuchando La red. Y enseguida te enumera “Jorge Rial
me habla de nueve a una, y unos muchachos que hablan de futbol, me hablan de doce a dos. Me contaron
de los líos que hay en Boca con Riquelme. Por algo me lo dijeron,
tengo que arreglarlo”
Ahí está la nona, la última vez que
la vi, esta mañana, hace un rato, había salido, no sé si para el psicólogo o
para La boca