Capítulo 1
1
Al alma
gemela en sus sueños
Se la encontró y como toda
cosa le dijo
Si yo tuviera que tener amor con vos, si yo tuviera que tener amor con vos, buscaría el abrazo, como ese último
abrazo que no dimos. Vos te paraste, tenías un pantalón de vestir que lucía tus
piernas perfectas. Ojo, te voy a decir todo esto pero te tengo que decir que el
abrazo no fue un abrazo sexual, yo no hago abrazos sexuales, cuando abrazo un
cuerpo abrazo un alma. Pero si, y después me quede pensando. A mí me dieron
ganas de contarte la biografía de tus piernas en mi imaginación. Me dieron
ganas de hablarte de la primera vez que te vi, fuimos a jugar un partido mixto
que organizamos, uno en cada equipo. Éramos dos jugadores relevantes de ese
deporte, cada uno organizó un lado. Nuestro encuentro era un choque de trenes.
Te levantaste el buzo, dejaste a la vista lo que no se dice que se ve pero se
ve. Y en ese momento se paró un poco el tiempo, nunca más me olvidé de ese
momento en que quedó a la vista el final de tus piernas y el principio del
cielo para los dos ¿Esta mal decirte esto? Perdón si está mal. De todos modos hubo muchas cosas de vos que nunca olvidé, creo que nunca olvidé ninguna. Después jugamos,
tenías muchas ganas de hacerme un gol, yo muchas ganas de que no me lo hicieras.
Creo que la energía sexual la canalizamos en esa competencia. O quizás no había
ninguna energía sexual, éramos más jóvenes, más libres, y habitábamos otro
mundo. En una se las jugadas te salí arrodillado, ya me arrodillaba adelante
tuyo. Salí muy rápido, siempre fui muy rápido para vos. Y vos te viste atorada.
Siempre te atoré. Pero sin embargo tiraste, la pelota me dio en los genitales,
con el protector puesto y el rebote te cayó. Volviste a tomar la pelota, tenías
muchas ganas de hacer el gol. Volviste a tirar, me paré y te lo volví tapar con
las piernas. Siempre tuve buenas piernas. Me volvió a rebotar, te volvió a
quedar la pelota. Yo estaba lejos del área y volví a buscarte, esa vez te
busqué con el palo. Te quité la pelota y la tiré afuera. Quedaron todos
sorprendidos por esa pequeña competencia entre vos y yo. Esa misma noche te
hubiese hecho el amor, de manera tan fina, tan suave, tan dulce, tan pausada,
tan larga, tan detenida, tan sentida, tan mágica, tan poblada de nosotros dos,
tan íntima de dos desconocidos que se interesaban, no sabían que eran almas
gemelas, o vos quizás sí. Tan cercana, tan personal, que esa misma noche, sin
hablar una sola palabra, con el lenguaje silencioso de nuestros cuerpos
hubiésemos tenido toda la información que no nos dijimos jamás de nosotros. Yo
hubiese sabido como besás, como mordés, como acariciás, como sonreís, como
reaccionás al dolor, como decís basta o pedís más, como sonreís, como te
cubrís, como tenés frio, como te tapás, como te pegás a otro, como te volvés con
otro uno solo. Como te dormís despacio abrazada a otro ser en el exacto mundo
en que la luna nos habita a los dos y entramos a todas las dimensiones de la
mano. Pero toda esta biografía, todo este abrazo de la vida, todo este festejo
de la creatividad, la luz, la sexualidad, la originalidad y las almas entregadas
en un abrazo, con todas las formas de ese abrazo, simplemente no las conozco,
porque nos debemos el otro. Te dejo con sus pensamientos
Y así se fue. Ella que no dijo
nada en todo ese discurso, no lo podía decir, se quedó mirando callada
Terminó de escribir eso, lo
apartó de la hoja y escribió en otra hoja
Son un canalizador, canalizo,
todo el tiempo, ahora mientras escribo este encuentro ficcional que nunca
sucedió pero que tiene cosas reales que si pasaron, las canalizaciones, las
palabras en la pared que leo, me dicen: más tranquilo. Después de eso, escribió. Sabés
que te amo y quiero estar con vos, no sé si vos también, no parece ser. Y sabés que soy un
escritor libre y un ser que hace su propia realidad. Canalizó una pequeña
charla telepática con ella que no escribió, donde ella le dio permiso. Y después se puso a
escribir el recuerdo de lo que había sido ese día de trabajo. Estaba agotado,
había trabajado mucho. A la tarde había ido una amiga a hacerse reiki. Había
llegado se había sentado y habían empezado a hablar. Lo voy a contar en
presente. La persona de toda esta historia esto es un amigo, y por una cuestión de velocidad
voy a contar en presente su historia
La angióloga
Su amiga llegó, empezaron a
hablar, era una angióloga, contó algunas cosas suyas, hablaron de los arcángeles.
El conectó, le vio a la derecha de ella un arcángel con un rayo cayendo. Le
preguntó ¿Quién es el arcángel con el rayo cayendo? Ella le dijo Jofiel. Él le
dijo, te veo un arcángel con un rayo cayendo. Ella le dijo: Que lindo, es el
arcángel del amor. Él le dijo, está ahí con vos, te está acompañando. Pasaron
al gabinete de reiki. Ella se acostó, el conecto para hacerle reiki.
Comenzó la sesión, aun antes
que comenzara ella ya estaba llena de ángeles que la rodaban. Se puso atrás de
su cabeza y empezó a mantrar el sei he ki muy agudo, muy suave, en un tono que
le permitía ver, aunque también le permitía ver concentrarse o que el otro le preguntara
o le diera permiso para ver que tenía. Veía con el tercer ojo. Le empezó a
hacer reiki en las marcaciones de tercer ojo, empezó con los ojos, tapándolos
con la mano. Enseguida conectó y empezó a ver, un ermitaño de la carta del ermitaño
estaba a la derecha, a la altura del hombro de ella. Una bruja estaba un poco más
atrás del ermitaño. La imagen de la bruja le despertó alertas y preguntó si la
podía bloquear o neutralizar o mandar para abajo, o más que nada desactivar, y
que no pudiera hacerle más nada a él, le dijeron que no, que la dejara. Entendió
que no era algo malo, sino le daban permiso. Jamás hacia nada que no le dieran
permiso, y jamás dejaba de preguntar antes de moverse. Mientras fue viendo le
fue diciendo. Mantra de nuevo le vio en la zona de los pies un portal que se abría
a un lugar llano de naturaleza, luz y belleza, estaba Jesús, estaba la virgen
con una nena en brazos y otros niños alrededor. Estaba Jesús, había más seres
de la luz. Siguió mantrando. Le fue diciendo lo que fue viendo. Se fue a los pies.
Empezó a hacer reiki y bostezar. Ella también. En la cabeza, cuando hacia el
seiheki pronunciado y fuerte le pidieron que lo hiciera más despacio, que la
tratara suave, que estaba tratando un Ángel de Dios. Le fue haciendo reiki en
los pies y diciéndole que el tema estaba en el chacra raíz. Volvió a mantrar,
apareció enorme la imagen de Dios ante ellos mirándolos con un solo ojo y
cuidándolos. Apareció en la sesión, cuando estaba en la cabeza, el alma gemela
de él, a la derecha, viendo todo lo que hacían, con atención pero sin
preocupación. Estando en sus pies a su derecha apareció la imagen de un
ermitaño, pero mujer. Esa imagen empezó con desconfianza, pero se fue acercando
de a poco. Con el correr del trabajo, se acercó más, se sacó la capucha, era
una elfa azul hermosa, que la acompañaba. Conectó y le dijeron que tenía que
trabajar en el estómago, sacarle el lazo que le cruzaba el estómago, desatar el
nudo mariposa que tenía ahí bloqueando. Fue al estómago, mantró, hizo reiki,
mantró muy agudo el sei he ki, elevó las manos mantrando y cuando las bajó por
primera vez en su vida como reikista sus manos la manejaba algo más, una vibración
muy alta. Esa vibración bajó sus manos, usaba sus manos y sus manos eran más
grandes, y le dijo que el nudo se lo tenía que desatar ella. Él se lo dijo: El
nudo te lo tenés que desatar vos, el nudo en la panza. La palabra que me
repiten una y otra vez es mariposas en la panza. Tenés mariposas en la panza y
tenés que desatar el nudo. Ella dijo ¿Será esto? Y se sacó un algodón con el
que cubría su ombligo. El la dejó hacer. Antes de eso, estando en su cabeza,
mientras hacia reiki y canalizaba las voces para ella iban diciendo, amor,
voluntad, razón, verdad. voluntad va a introducir la verdad y la realidad.
Primero voluntad, después verdad y realidad. Durante la sesión había aparecido
un parasito de mucho tamaño, en forma de araña, y él sin decirle nada lo había
bloqueado, lo había enterrado y lo había mandado lo más lejos posible, podía
hacer todo eso en una combinación de su visión, su imaginación o creación de
mundos y sus manos. Moviendo sus manos movía ese mundo. En ese momento un Ángel
enorme había aparecido atrás de ellos y los había cubierto con las alas y
protegido. Terminó con la panza y volvió a la cabeza, siguió mantrando con un
hon sha se ko nen y un sei he ki, y un on tara tu tare ture soja, y ya la vio
entrando en ese mundo que tenían la virgen atrás con las niñas, los niños, con
el ermitaño a la derecha, y de la mano con la elfa hermosa, azul, que lo había
tomado de la mano y lo acompañaba a entrar. En el mundo de ella el nombre de la
elfa no supo quién era. En el mundo de él, si el entrara a ese lugar, el nombre
de la elfa era el de su alma gemela. El alma gemela en él era la mujer con la
que se había enfrentado en un juego de hokey hacía muchos años y que le había
escrito lo que le había escrito al principio. Terminó la sesión con la amiga
que había ido a hacerse la sesión. Charlaron un ratito, ella vio que la vela
titilaba, sabía mucho de velas y angiología, entendió que le había dicho que le
habían estado hablando. Algo le dijo a él que no le podía cobrar la sesión, que
era un regalo. No le cobró la sesión, ella la quiso pagar y él le dijo que no
se la podía cobrar de ninguna manera. Antes de eso, y cuando había iniciado la
sesión de reiki, había pedido que lo acompañara una energía, siempre lo hacia
la virgen o Jesús, pero para acompañarla en la sesión con ella había bajado el
arcángel Metratlon. Se lo había dicho. Ella le había dicho en la charla que tenía
el tercer ojo bloqueado porque se había asustado y él había pedido permiso para
desbloquear el tercer ojo y le habían dicho que ella tenía que querer y que no
quería. Durante la sesión, en el medio había aparecido un arcángel y le había
dicho que ahora si podían abrirle el tercer ojo, pero que lo iba a hacer el. Él
se corrió y le tocó la frente con una vara y le abrió el tercer ojo. Casi al
final de la sesión, después que ella se sacó el algodón del ombligo, le habían
dicho que ahora si le podía abrir el tercer ojo. Había ido hasta la frente y le
había abierto el tercer ojo tocándole con los dos dedos en espada china la
frente. Le había dicho que ella temía, que no tenía nada que temer, que la
acompañaban y ayudaban. Y así había terminado la sesión
La saludo, ella se fue.
No tuvo mucho tiempo,
enseguida lo llamó un amigo que estaba en problemas
Antes volvió a pensar en su
alma gemela y escribir sobre ella
El reflejo de
los desencuentros
Agarro el ordenador y escribió sobre su alma gemela
“Te cuento, por cómo nos
relacionamos los últimos meses, por lo que más o menos me mostraste que te
pasaba conmigo como me llegaría que querrías
que estuviéramos juntos. Después de todo esto no se trata de otra cosa
de la misión que nos dieron de tener un hijo de la virgen, una hija que nos
pidió que tuviéramos la virgen, que sería una hija de la luz. Y además
activarnos como almas gemelas. Una activación que hace muchos está esperando
para hacerse. Te cuento
Yo te imagino llegando a mi
casa, entre con interés y desconfianza, dándome un abrazo lejano y cuidado. Hablando
conmigo, aceptando a regañadientes los dos nuestro destino, vos por falta de
deseo, o de respeto, yo por dignidad. Dándonos un beso en la mejilla frio, mecánico, poco sentido, con cualquiera de los dos en cualquier momento a
punto de decir, esto no va a funcionar, dejémoslo. Después un abrazo distante,
donde vos me vas a apoyar las manos en la espalda, con tus palmas me vas a
apoyar arriba de los omoplatos, donde anoche me mataba de dolor los hombros y
la espalda alta, y yo te voy a apoyar las manos en la cintura, no tan abajo
como para que no te pienses que me aprovecho del abrazo. Vamos a mantener la
cabeza lejos, no sea cosa que la inercia normal nos vaya llevando a un beso,
vos por la falta de deseo, yo por el sentido del respeto, pero más que nada del
auto respeto, en este mundo el mejor de los respetos. Si eso se alarga un
poquito más, si tenemos suerte, vos vas a sentir que en la espalda tengo músculos
y no demonios. Que tus manos van a querer frotar a manera de aliento, como se
frota a una persona de mucha edad a la que por la espalda le pasó mucho mundo.
Y vas a notar en tus manos todo el mundo que sostuvo esa espalda, todo el mundo
para mí y para todos. Después vas a notar si estás muy conectada todos los
largos que hicieron esos músculos, todos los pesos que levantaron, toda la vez
que movieron el cuerpo completo, todos los golpes de full contac que
recibieron, todos los soles que tocaron esa piel, y te vas a dar cuenta que me
podés amar, aunque jamás lo hagas. Porque la pausa hace que entre la comprensión
de todo, y todos los amores. Yo no voy a
necesitar toda esa biografía, con ponerte las dos manos en la espalda baja, ahí
donde empieza la cola y termina la espalda, donde el cuerpo se hace más fino,
voy a saber que ese cuerpo me afirma al mundo y me sostiene en él, y que me
encaja justo porque lo sacaron de mis sueños, que está hecho para mí, como yo
para él, Después de eso, si nos damos un segundo más en el abrazo, vas a llevar
distraídamente la mano en la nunca y nos vamos a acercar a que la cosa empiece
a tomar otro rumbo. Y yo voy a estar tentado en separarme un poco y mirarte a
los ojos, a ver que hay ahí adentro, y decirte. Si me querés como yo, cosa que
dudo mucho, lo ensuciamos tanto que ni sabemos cómo continuar, llenamos de tierra
los caminos hacia el amor, y de tu lado, algunos levantaron barricadas, y
algunos de los que decían que estaban de mi lado, o del tuyo, pero estaban del
propio. Una lástima. Y eso, es la mejor posibilidad. La otra es lo siempre, me
convocas en un bar, para que no haya posibilidad de intimidad, como convocaste
a millones de personas, charlamos, avanzo, retrocedes, no nos entendemos, y me
voy sabiendo que te quiero, que sos algo bueno, pero que como también me quiero
tengo que encontrar el modo de no volver a verte. Y si sucede ni lo peor ni lo
mejor, una cosa intermedia, solamente podría no darte un abrazo sino pedirte
que recuerdes lo que pasó por tu mente y tu cuerpo lo última vez que nos dimos
un abrazo de amigos para saludarnos en tu despacho, antes que me fuera yo,
porque algo se movió en vos y yo lo noté, fíjate adonde te lleva eso que se movió,
porque ahí está la razón de tu destino. Ese estremecimiento, por la positiva o
la negativa, es un mapa, tu cuerpo te habla desde ese pasado, para que vengas o
te vayas”
Terminó de escribir este texto
y salió para lo de su amigo
La carta el ermitaño del Tarot
No sé por qué razón, contando
la historia de mi amigo volví a volver a cambiar el tiempo verbal, ahora lo
empecé a escribir en presente, pero voy a seguir el impulso, que significa algo. Lo que sigue va en presente
Lee esos fragmentos y sale
hacia lo de su amigo, que lo acaba de llamar de urgencia. En el camino su amigo
le envía un mensaje y le pide que no toque timbre, que golpee la ventana. Más
adelante, en el mismo camino, se olvida, llega y toca timbre. Lo atiende su
amigo, está en mal estado
Entra a la casa, le cuenta que
estuvo un día entero vomitando bilis, que vomitó un litro de bilis, que no
tiene nada en la panza, y que tiene un peso enorme que le aplasta la espalda.
Le pregunta que le puede pasar. El conecta, se da cuenta que la cosa esta
complicada, las señales que le muestran es que se está yendo. Su amigo se
acuesta en la cama, él se sienta al lado de el en la cama. Su amigo le cuenta
los síntomas que tiene, hernia disparada, hinchazón en la panza, sueño, cansancio
y un peso enorme en la espalda y los hombros como si alguien lo aplastara para
abajo. No hace falta ser médium para saber que eso es sobrenatural y una
energía que tiene en ese lugar está trabajando contra él. Le pide permiso para
ver, el amigo se lo da. Y cuando mantra el seiheki alargado y agudo y recibe el
permiso para ver, ve una araña enorme que esta frente a él, y que tiene una de
las patas atravesándole la frente, justo del lado del tercer ojo. Por eso su
amigo, que es médium también, le había dicho que no podía conectarse con las
energías que se conectaba. La pata le bloqueaba el tercer ojo. No esperaba
encontrar una araña, pero cuando había entrado, lo que le habían mostrado, lo
había llevado hacia ese lado, le habían mostrado una hoja de una planta de
palmera del tamaño y la forma de una araña que estaba adelante y bloqueando un
globo blanco. La araña bloqueaba la luz. Su lenguaje para ver con el tercer ojo
era muy simbólico. Cuando mantra y la ve hace lo que hace siempre, la toma con
luz, la manda debajo de la tierra y bloquea ese lugar de tierra en el que está
con un vidrio en el piso. Como su creación simbólica es poderosa y su
imaginación es alta, todas las energías densas que están absorbiendo a las
energías que le piden ayuda y que el bloquea, no puede romper nunca sus
construcciones simbólica, se quedan siempre donde las pone, y siempre las
personas con las que trabaja se van recuperando, física y mentalmente. Se queda
con él al lado de la cama, la charlando y la araña se mueve queriendo volver,
romper el vidrio que tiene en el piso, todo esto a los pies de él. Aparecen
otras, son varias, enormes todas, del tamaño de medio cuerpo humano, y van y
vienen como las hormigas desesperadas, buscan un lugar para volver. Se lo dice
a su amigo, quieren volver a vos, no van a poder pasar el límite que les puso,
si querés las puedo disolver en luz y listo. Y su amigo le da una enseñanza de
sabiduría que atesara como un tesoro y que cambio la manera en que se empezó a
enfrentar a estos problemas. No las mates, déjalas que signa su camino de
evolución, lejos de mí. A él algo le haca un clic en la cabeza y dice eso, como
siente el amor en las palabras de su amigo, eso le da comprensión, y dice con
amor. Váyanse de acá, sigan su camino de evolución sin nosotros. En ese momento
sucede la segunda cosa maravillosa. Esas arañas que estaban queriendo volver y
romper el vidrio y que representaban enormes parásitos de la energía.
Comprenden, percibe su compresión, respetan, se dan vuelta y se van. La
oscuridad responde al amor cuando la energía del amor es tan grande que es
inevitable, eso aprende de su amigo. En ese momento para sellar el trabajo hace
algo que le es canalizado, se pone las manos en medio del pecho en señal de
rezo y dice: “Sigan su camino de evolución por otro lado, el- y dice el nombre
de su amigo- es de la luz, reclamado por la luz y por Dios, no tienen permiso de tocarlo. No les corresponde” Y
repite lo mismo para sí mismo “Sigan su camino de evolución por otro lado, yo-
y dice su nombre- soy de la luz, reclamado por la luz y por Dios. No tienen
permiso de tocarme. No les correspondo”
Vuelve a mantrar sei he ki
alto y lo que ve ahora adonde estaba araña son unos seres de luz azules, un
hombre, una mujer y un niño, que están frente a su cabeza. Le dice esto, su
amigo le dice que son los seres que los que se comunica, que no se podía
comunicar. No lo ´podía hacer porque la araña tenía la pata en el tercer ojo, atravesándolo,
lo bloqueaba
Termina la sesión, su amigo le
dice que no siente más ese peso en la espalda y los hombros. Al otro día lo va
a llamar por teléfono y le va a decir que ya está mejor, él se va a dar cuenta
que si por el tono. Le marca la enseñanza que le dio, se la agradece. Y se va
Baño de mar
Llega a su casa, se prepara
jun baño de bañera con sal, y en el baño de bañera con sal recibe más información.
Sumerge la cabeza abajo del agua y va recibiendo, con la amiga que había venido
antes había trabajado el chacra raíz, el sexual, el cardiaco, y el tercer ojo.
En las marcaciones que se hacía trabajaba el chakra plexo solar, el sexual, el
cardiaco y el tercer ojo. Pensando todo eso, en la ducha, llega a una conclusión.
Antes había recibido una información de otra amiga, que sobre una obra de
teatro que había escritor él le había dicho que la escritura erótica, el texto
de escritura sobre amor sexual era revolucionario. Asociando todo eso, y todas
las experiencias de ese día y días anterior se había dado cuenta de una cosa.
La energía sexual era el motor del salto dimensional pero no era de arriba
hacia abajo, el movimiento era más circular, en 8, por eso se repetía tanto el
8. No era que con la humanidad tenía que pasar del chakra sexual al cardiaco
usando como motor el chakra del plexo solar. Era un 8, un infinito, un circulo
que formaba dos circulo, funcionaba como una pista y no tenía el principio donde
creían. Lo había aprendido en casa de su amigo, se lo había dicho tantas veces
sus maestros de yoga y taichí. La energía sexual era muy importante pero no iba
a ir al chacra cardiaco y lo iba a modificar, porque iba a ir con esa energía e
iba a tener en el chacra cardiaco cosas aun de la energía de su chacra, la posesión.
Era al revés, del chakra cardiaco tenía que bajar la energía, pasando por el
plexo solar en forma de energía de amor, con eso iba también a modificar la energía que miedo que se acumula
en la energía del plexo solar, iba a bajar aún más hasta el chacra sexual y con
eso iba a modificar la energía de posesión y miedo que se acumula en el chacra
sexual, después de todo la posesión tiene su motor en el medio y el chacra
sexual también acumulaba miedo, que
empezaba su acumulación en el chacra del plexo solar. Una vez ahí, trasformadas
esas dos energías con la energía cardiaca que va a haber bajado con su naturaleza
del amor, iba a volver a subir reforzadas con sus características, la energía
sexual que fabrica y modifica mundos, la energía del plexo solar, que es una
batería y acumula, y llena de la energía necesaria, hasta volver al chacra
cardiaco, que es la energía del amor, la energía del universo, y la energía que
define las relaciones en este nuevo universo. Y esta ingeniera, este mecanismo,
este lugar estaban ahora. Después de eso, quizás vaya a seguir subiendo hasta
el chacra laríngeo, que era la manifestación de la particularidad y el chacra tercer
ojo, que era la conexión interdimencional, para terminar en el chacra corona,
la fuente misma. Pero eso más adelante, todo
Por eso, concluyó analizando
metido completo abajo del agua con sal marina de su bañera, por eso en su lucha
con las arañas, a las que si bien había bloqueado no dejaban de querer volver,
cuando las había tratado con amor y altruismo, desde el chakra cardiaco, habían
entendido y se había ido, y no había bloqueado esa realidad, la había transformado
completa. Desde el amor todo. La energía motora de la ingeniería de este nuevo
mundo, era el amor, la empatía y al alma. Entendió esto, mensajeó y le contó
todo esto a la amiga angióloga que había venido a hacerse un reiki y se fue a
descansar