Todas las abejas en la ventana vieron como en el espacio de al lado, unos hombres comenzaban a desarmar las paredes de una casa, la agarraban y se la llevaban y en unos minutos donde había estado la casa quedaba un espacio vacío. Después las partes de una pequeña elevación que parecía una pequeña sierra, la ponían en camiones y se la llevaban. Y enseguida de eso se llevaban andando con carros enormes árboles. Enseguida las paredes de otra casa que había al lado. A continuación la luna, después dos o tres estrellas, y así poco a poco, los hombres hacían desparecer todo lo que había a la vista y solo quedaba vacío.
-Los hombres-dijo Melina-los hombres se llevan las cosas
Que cosa mas loca
, el mundo desparece porque ellos se lo llevan
Lo cargan y se van
-¿Para adonde?-preguntó Solitaria
Que malaria
-¿Adónde podrían llevarse el mundo si todo es mundo?
No hay un lugar donde poner el mundo que no fuera mundo
-Quizás- Dijo Von Firch- Hay otros mundos que no conocemos
No lo vemos
-Mundos nuevos
Eso me temo
-Claro Melina. Pero donde no estamos nosotros, las abejas
Que cosa más despareja
Comentó con amargura Von Firch mientras veía a los hombres llevarse otra casa y otras estrellas, llevarse todo menos a ellas
-Y eso es lo que está pasando,
Lo estuve averiguando
por eso me fui del panal,
eso era lo que estaba mal
para buscar las razones
y soluciones
Los hombres no lo entienden y buscan e investigan, y se preguntan ¿Por qué desparecen las abejas? -comentó Melina-desparecen las abejas porque desparece el mundo de las abejas. Y uno es en su mundo, aún más, y esto es algo que los hombres aún no han aprendido, uno es el mundo
Y todas las abejas se quedaron mirando por la ventana como los hombres seguían desramando el mundo y dejando un espacio vacío delante de él
-Un espacio vacío- Se quejó el jefe explorador- las abejas no comemos espacios vacíos. Si quieren que haya abejas no tienen que dejar más espacios vacíos como ese.