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sábado, 18 de mayo de 2024

Diario de un argentino. 18 de mayo 2. Calor

 

Mientras tengo a uno de mis alumnos de escritura escribiendo una novela, yo trato de arreglar la computadora. Voy al patio a hacer tiempo y los ojos se mueven solos, me muestran solos cosas. primero unas plumas que hay en el suelo, bien blancas, bien espumosas, de algún pájaro. Y después una nube que tiene forma de ala que sale de otro grupo de nubes, y que esta mucho mas iluminada que las otras, como si tuviera luz propia. Una voz en la cabeza me dice que estoy viendo un arcángel, el arcángel Miguel. Mañana es el día del arcángel Miguel. Me acuerdo de uno de los ejercicios de ayer, del libro de los ángeles. Había que concentrarse en la zona del corazón y conectar con él, primero con sus latidos, y después con la sangre recorriendo todo el cuerpo. Después había que imaginar una luz o una llama en la zona del corazón. Yo visualicé una esfera blanca en la zona del corazón, y sentí mucho calor en toda la zona del pecho y el plexo solar

Ayer volvía de la calle y me encontré en la esquina a Cristina con todos los perritos. El triste se me vino y se tiró al lado mío para que lo acariciara. Cristina me dijo que el triste está todo el tiempo buscando cariño, está necesitado de cariño ¿Qué habrá pasado en la vida del triste? ¿Qué pasa en la vida y la mente del triste para que sea tan solitario y busque tanto cariño? ¿Por qué un día pasando por acá decidió quedarse con nosotros y adoptarnos como manada? Nunca lo voy a saber. Creo que mucho tiene que ver en eso Olivia, que adopta a todos los perros que pasan por el barrio como conocidos de toda la vida. Los lame, los integra, los juega

Escucho Instituciones, el disco de Sui Generis, mientras escribo. Y me quedo colgado del tema del texto anterior, la tristeza de la gente. No solo están haciendo un país pobre y miserable, están haciendo un país triste. De una tristeza desesperada, de gente que ve que se funde, que no llega, que no alcanza a comprar y que esto va a ser peor. Veo gente luchando y perdiendo. Veo gente triste, un enorme país de todas personas tristes. Y todo por un solo ser que no está en sus cabales y al que la gente lo puso a decidir por sus vidas. Y un grupo de señores que aprovechando la situación hacen enormes negocios inescrupulosos, y que se creen que toda la vida se trata solo de este mundo y que los males no se pagan. En algún momento, en algún lugar. de algún modo. Existe la ley de la causa y efecto, o del karma, y eso nos abarca a todos, nos abraza a todos. Y es una escuela para todos

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