Una de las grandes batallas
que estamos llevando en estos tiempos es en qué persona voy a escribir estos
textos, primera o tercera persona. Debatimos claro sobre mis textos. En esas
cosas uno se da cuenta hasta donde ha regresado, hasta donde han avanzado en su
propio campo simbólico. Sin hablar que de que uno está entrenado en la construcción
de sentido por las universidades nacionales, sociología en La Plata. Comunicación
social, en la UBA, Fm La Tribu Capital, una universidad de la radio. Por alguna
razón debatimos en mi campo símbolico, hace mucho, años, una batalla que ya me
está cansando, o sea, en el campo de mis deseos, de mi construcción de sentido ¿Por
qué lo hacemos? Porque me pueden considerar loco por publicar textos de canalización.
No es un gran aliciente para mí como escritor. Ya me consideran loco y mil
cosas terribles más, aun antes de escribir las verdades en primera persona ¿O
sea, cual es nuestra preocupación entonces, si ya me consideran eso y otras mil
cosas más? León canta el tema Los Alieris de Charly y dice “…ahora son todos
enfermitos, ahora son todos drogadictos…” “es mi país es el país de Cristo,
damos todo sin recibir… menos mal que estamos acá, nosotros no vamos a tranzar…”
Mientras escribo esto suena de
fondo “Sera que sos un ángel y no podés disimular”
Hoy pienso claramente que Dios
está en las formas geográficas. Ayer cuando me desperté, con el calor de ayer,
mirando por la ventana abierta de mi pieza, vi dos árboles, uno atrás del otro,
el follaje de arriba. El primero terminaba en un triángulo para arriba, el
segundo terminaba en un corazón “Yo ya no pertenezco a ningún ismo” canta Fito Páez
“Tendré que hacer lo que es y no debido, y tendré que hacerte bien y tendrás
que hacerme daño” Me dije a mi mismo “Dios me habla en las formas” Dios es un triángulo
con un corazón atrás. Dios está en las
formas geográficas. No fue la única vez que en estos días me habló Dios en las
formas geográfica ¿Y qué dice? Algo simple, pero lo que más queremos saber, lo único
que le daría sentido a todo. Estoy, dice. Tranquilo, estoy. O sea, dice, soy, y
como soy, sos. Sea lo que sea, pase lo que pase, soy y sos “Me gusta estar al
lado del camino” canta Paez “Nadie nos prometió un jardín de Rosas, hablamos
del peligro de estar vivos” Cuando
vuelvo de pasear a Firulait y dejo la correa siempre queda tomando forma de corazón
u otra forma más imposible, a veces un circulo, a veces otra. Casi todo toma
forma de triángulo, las cosas se rompen en triangulo, si dejo algo apoyado
sobre algo queda en forma de triángulos. Dios nos habla en las formas, de que
nos habla, de su misterio, de sus formas ¿Dios es una forma que nos habla en
las formas? Ahora empieza un tema que dice “No voy a parar, yo no tengo dudas,
no voy a rajar, déjalo que suba, por eso no quiero parar, ya no tengo dudas…”
Dios nos habla en las formas, pero en lo que más nos habla Dios es en la noción
de que podemos escuchar. Dios nos dice hablándonos que lo podemos escuchar, y
que nos puede guiar de manera más directa, más simple. Por ejemplo, a mí me
dice, que escriba, que publique y que me deje de preocupar. Estoy terminando de
escribir, aparece Firu, le digo donde me acuesto yo, mira la camilla del reiki,
sabe que a veces me pongo ahí a hacerme un auto reiki. Dios, por ejemplo, además
de las formas con las que habla, muchas, miles, habla con las formas geográficas.
Y mi perro Firulait, habla con los ojos, con la mirada, y con las casualidades.
Todo es una dialogo constante con la divinidad, los sepamos o no ¿Y a vos, que
te resuena de todo esto? ¿De qué modo te hablan? ¿Cuándo? ¿Quién?
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