La crisis (Unipersonal de teatro)

 

(Suena el teléfono en una casa, atiende una mujer, habla por teléfono)

-Hola! ¿La crisis del 23? Pero si recién empieza este año (al esposo) Gordo, la crisis de 2023 me llama ¿Es para mí o para mi esposo? Ahh, para él, me parecía. Si el si, èl las crisis las toma enseguida y a toda velocidad, es como una curva, para èl es como una curva, las toma a todo lo que da. Todo el tiempo esta como en autopista él. Emocional, como no hay. Y te agarra la crisis derrapando, y además nos lleva a todos nosotros en un carro atrás, así que el derrapa pero lo que va atrás, nosotros, se estrola. No diría un acoplado. Él nos dice que somos un acoplado. El le dice que somos un ancla, yo prefiero decirle un acoplado. Menos mal que somos un ancla para agarrar a menos velocidad los desastres. Porque él, tiene (al esposo) Estoy hablando con tu crisis de este año gordo, ya te la dejo para vos. Dame un segundito, enseguida la agarrás y hacás todos los desastres que tenás que hacer. No ¡Un ancla sos vos! Además la estoy preparando para vos, porque vos después agarrás las crisis y las agotás! (ahora habla por teléfono) La crisis del 22, el 22 se fue por él, desde septiembre se quiere ir el 22, lo agotó, te agota este hombre. Tiene una energía desbordante para la crisis. Yo le digo ¿Sabe cómo le digo crisis? Energía desbordante selectiva. Eso es lo que tiene, una energía desbordante selectiva, para la emoción, para enojarse, para ahogarse en un vaso de agua, para pelear con otros hombres, para meterse en créditos y mandarse cagadas, ahí el tipo tiene una energía que no se puede creer. Te agarra un rinoceronte te lo voltea. Un día volteó un chancho, lo agarró al medio, lo embistió. Un chancho de 25 mil kilos ¿Puede ser? Panchiiii (le grita a su hijo) Los chanchos pueden tener 25 mil kilos? (a la crisis) Panchi es mi hijo, el más chico. Bueno, le decía, agarró un chancho de 25 mil kilos, lo agarró al medio y lo hizo dar tres vueltas en el aire ¿Puede ser? En ese momento salió volando una mariposa hermosa ¿La crisis para mí? ¿Usted para mí? Nooo, ni en pedo. Me sentiría halagadisima crisis, pero noooo, la crisis no es para mí. Acá todas las crisis son del gordo, no le erra una. Se le juntan, es como una avenida de crisis el hombre. Ya no sabe despelote de que crisis tiene, que trauma es el que le hace hacer que cosa. La única crisis que tengo yo es la crisis matrimonial, pero la comparto con él, y es toda de él ¿Cómo le puedo decir? Vio como cuando Messi hace un gol que pasa a 10 tipos, y se la da, pongamos a Julián Álvarez abajo del arco, y Álvarez la empuja. Bueno, él es Messi en la crisis matrimonial. Las hace todas, hace cosas que no podes ni creer. La hace de gambeta, taquito, de sombrero. Frena y arranca, frena y arranca, como hace Messi, eso lo hace constantemente, por eso no me sorprende Messi. Cada vez que halagan a Messi yo les digo: De que se sorprenden, yo lo veo a mi marido hacer eso todos los días, frenar y arrancar, amagar que va a hacer una cosa y hacer otra, y dejarnos a todos pagando con la primera. Dar vueltas como una calesita en el mismo lugar. Esconderte la pelota, hacerte creer que se la va a dar a uno y se la da a otra. Dice andá pa allá bobo. A los pibes todos los días le dice, andá pa allá. Anda pa allá. Hay perdón crisis del 23, hablo mucho. Ya viene el gordo ¿Le puedo hacer una pregunta a usted…? No sé si es señora o señorita o señor, o bueno… ¿Las crisis son señoras o señoritas? No, deje, respondo yo, señora. Porque las de él son señoras crisis. Que siempre que están las señoras, como pasa siempre, vienen los señores, porque él empieza agarrando señoras crisis, y terminan viniendo señores despelotes. Pero señores despelotes, señores señores señores. Si, perdón, me disperso, por eso no me agarran las crisis, por eso estoy segura que usted llama por el gordo, porque yo me olvido que ando con las crisis, las pierdo, las dejo en casa de mis amigas y ellas me la agarran. Ahh siii, ellas también agarran todas las crisis que andan dando vueltas, no le esquivan a ninguna. Ehhh, pere un poquito. No me grite señora crisis! Ehhh, que carácter la crisis. Que impulsiva, y si, es una crisis, las crisis son impulsivas… son repentinas ¿Las crisis son repentinas o se van formando de a poco? ¿Ustedes son intuitivas o estudian para crisis? ¿Cómo se organizan ustedes? ¿Ustedes son de quedarse o de irse? Porque las del gordo se han quedado todas, tiene como diez crisis a la vez con el ¿Son de madrugar o más bien agarrar y aparecer a la noche cuando uno se va a dormir y no se puede dormir porque la crisis le da vuelta y le da vuelta y le de vuelta y le da vuelta y le da vuelta y le da vuelta y le da vuelta en la cabeza? Ya viene el gordo, se está emperifollando. A él le gusta agarrar la crisis prolijito, ordenadito, para dedicarle todo el tiempo del mundo. Va a ver qué bien se va a llevar con mi gordo, es divino para las crisis. Es un ángel, las trata de bien, le dedica tanto tiempo, les presta tanta atención. Además no es mezquindar, nada, ni plata ni tiempo, ni atención. Si tiene que estar todo el día con la crisis está todo el día con la crisis, si tiene que perder toda la plata con la crisis pierde toda la plata con la crisis. Y además, es muy familiero, no va solo a la crisis. Noooo, lleva a toda la familia. Cucheme, nos mete a todos ahí. Y guarda que alguno no se quiera meter en la crisis, nos mete a todos en la crisis, a presión. Igual no hace falta meternos a presión porque en la crisis de él hay lugar para todos, porque las crisis crecen con él. Vienen chiquitas y se vuelven enormes con él. Ufff, él les saca lo mejor de sí. No, perdón, le preguntaba. Perdón, por chulula, porque es el primero de enero y ya se nos viene la crisis del 23 y como son tantas crisis y es tan difícil, traer algo nuevo, ser original ¿Qué es lo que se trae de nuevo? ¿Con que viene usted? Ah, perdón, ha perdón, me está entrando otra llamada. La dejo en espera, ya estoy con usted y ya le paso con el gordo (atiende otra llamada) Holaaaa ¿La crisis de la tercera edad? ¿Para mí? Si si, es es mi nombre. Pero no, como para mí. Si si, tengo 42 ¿Pero tercera edad? ¿Tan hecha mierda estoy? Ah ah ah, me parecía. No es para mí, es mi nombre pero es para. Si déjeme adivinar ¿Rubén? Mi esposo. Sí, es lógico (El esposo) Rubennnnn, Rubennnnnnnnnnnn. Teléfono para vos, la crisis. No, otra crisis, se te junto el ganado querido. La crisis de la tercera edad ¿Qué es ese insulto Rubén? No no, es para vos. Las pelotas para mi Rubén, las pelotas para mi Rubén (a la crisis) ¿Se fijó bien usted? Espere espere espere crisis porque acá son mandados a hacer para las crisis, todos agarran todas, pero nadie quiere agarrar la crisis de la tercera edad ¿No será para Rubén Antonio? El papa de Rubén. Fíjese bien. Claro claro, claro claro. Aja. Claro ¿Rubén paz? Sí, es mi Rubén. Se llama Rubén Paz ¿Lo puede creer usted? Eso nos dice claramente que la crisis de la tercera edad, o sea usted, es para. Ahhh ¿Por qué Rubén Paz? Es la misma pregunta que le hice yo cuando lo conocí. Porque son todos fanáticos de Racing de Avellaneda ¿Sabe cómo se llama el más chico nuestro? Cárdenas Olaran Sacanti. Todas glorias de Racing. Cárdenas el primer nombre, Olarán el segundo y Sacanti el tercero. No, ese es el de ellos, se llaman Sacanti. Se llaman sacanti como el jugador de Racing del equipo del coco Basile ¿Lo puede creer? Tienen el mismo apellido que el jugador, ergo, son fanáticos del Coco Basile. Pere pere pere que escucho algo de la pieza (A la pieza) ¿Gordo, vos estas llorando? Si si, está llorando ¿De nuevo gordo? (al teléfono) ¿Usted está ahí todavía? ¿Me escucha? ¿O usted ya se mandó para la pieza? Ah, ahí está, ahí está. Digo, no, porque lo escuche llorando, digo, ya lo agarro la crisis de la tercera edad ¿Sabe cómo se llama el más grande nuestro? Coco Costitas Basile Sacanti Por Costas el mítico defensor, y el Coco Basile, el mítico Coco Basile. Y Sacanti es nuestro apellido, como le dije ¿Sabe cómo se llama el perro? ¿Sabe cómo se llama el perro? El pato Filliol. Ahí viene, mire, lo nombro y viene. Es tan autorreferencial este perro pobrecito. Le puso por el pato Filliol que atajo dos años en Racing… Pero dos años, dos años de morondanga. Y pum, el señor hace lo que quieres. El señor y sus crisis que mandan en la casa. Nada que ver con usted, disculpe. Y pum pato Filliol al perro. Que yo le digo, le digo uy le digo siempre, le digo y le digo siempre, le digo y le digo siempre, le digo y le digo siempre, le digo y le digo siempre. Si, si, es cierto, me dicen que soy repetitiva ¿Cómo se dio cuenta? Le digo, es un perro, no es un pato. Se va a creer que es un pato. Y pum kabum. No no, no exploto nada, es un decir, una manera de decir. Y pum ¿Qué paso? Entro en crisis el perro… Además es un castigo esto, porque este, fanático de Racing, y en crisis por la crisis de Racing mira a cada rato los partidos del pato filliol de cuando jugo en Racing. Y el relator está acá rato: ¡El pato Filliol! ¡La agarro el pato Filliolll! Filiollllllllllllll! ¡Filliolllllllllllllllllllllll! Y el perrito viene a cada rato. Se cree que lo llaman a él (al perro) No no, querido, para vos no es. No no querido, no te están llamando a vos (Al teléfono) Cada vez que nombran a Filliol se viene. Y puedo creer mi querida crisis de la tercera edad, que yo ¿Sabe cómo me llamo? Ricarda Enrica Clausen la gringa Giuste. No no, son chiste, y sin seudónimo, es mi nombre completo. Porque mi viejo es fanático de Independiente, y me puso ese nombre por Bochini, Clauses y Giusti. Glorias de Independiente del 83 (al esposo) Che che che che, que nadie te está insultando acá. No le podés nombrar a nadie de Independiente que ya se brota. Ah, eso fue una crisis, otra crisis. La crisis del conflicto entre Racing e Independiente, de quien es el tercer grande. Él decía que el tercer grande son ellos. Ah ah ah ah. Pere pere pee. Si el tercer grande son ellos, el tercer grande es el, la crisis de la tercera edad, o sea usted, es para el (Al esposo)  Gordoooooooooo. Están al teléfono dos crisis que te están buscando ¿Seguís llorando vos? ¿Seguís llorando vos? Pere pere pere que este me sigue llorando. Ya estoy con usted, tengo que hablar con la otra crisis que tengo en espera. La crisis del 23 (habla con la crisis del 23) ¿Usted sigue ahí? ¿No paso todavía usted? Ya ya ya ya, ya la atendemos. Espere un poco. Siga pensando lo que le dije ¿Qué tiene de original usted para traernos? A ver, como le digo ¿Qué tiene para ofrecernos? Porque acá hay que traer cosas nuevas (pere pere que estoy con otra llamada) ¿Sigue ahí usted crisis de la tercera edad? ¿Sabe cómo se llama el canario de mi viejo? Luis Islas. Hay que ponerle Luis Islas al canario. Sabe, lo difícil que es volver a mi casa y preguntarle a mi papa ¿Cómo anda Luis islas? ¿Sabe porque le puso Luis Islas? Porque Luis Islas volaba. Pero el canario no vuela. Está en una jaula. Luis Islas Gardel, tres nombres, porque Gardel cantaba como un canario… en realidad un zorzal, pero el canario no canta… Lo único que hace es mirarnos con cara de Que pelotudos esto. Se lo digo así, literal, nos mira con cara de Que pelotudos estos. Nunca vi un canario que mire con cara de que pelotudos estos, pero este si. Pere pero pere, que me están llamando de otra llamada. Ya estoy con usted (Atiende la tercera llamada) Holaaa, siii, no me diga nada, usted es una crisis, claro que sí. Es para Rubén, claro que sí. Dígame adivina ¿Cómo? ¿Yo adivina? No no, no me diga adivina, es un decir. Vamos de nuevo ¿Es para Rubén? Bien, y dígame ¿Qué le digo? ¿Qué crisis lo llama? ¿Solicitado por las crisissss? Ffffffffff. Ah, ah, había oído de usted, nunca había venido por aca, interesante lo suyo (al esposo) Rubennnnn Rubennnnn. Para vossssssss, la crisis de los hombres (a la crisis) ¿Cómo le digo? ¿Cómo lo presento? La crisis del hombre, la crisis del género. La crisis del hombre… discúlpeme, si, pero esta crisis, no sé si es para él. No es tan hombre. O sea, no digo que sea gay, pero no es tan tan tan hombre, o sea ¿Qué está haciendo ahora? En la pieza, llorando. Sí, claro, si si. No no, guarda que llorar es de hombres. Guarda, cuidado que es de hombre también llorar. Rubeeeeeeennnn, dejaaa de llorarr que acá tu busca la crisis

(suena el timbre)

Perdón, timbre, Un segundo que atiendo

(va hasta la puerta)

-Siiiiii ¿Quién esssss?

(le responden del otro lado)

-Otra crisis (le dice al otro lado) Seguro buscan a Rubén. Bien. Buenísimo, espere que ya los atiende, esta con tres crisis más y enseguida los atiende. Y además está llorando, deja de llorar, atiende las tres crisis que acaban de llegarles y esta con ustedes

(escucha)

Siii, está llorando. Ah ah ah que interesante, deme un segundo, ya les abro

(A Rubén)

Rubén, acá te buscan de otra crisis, dicen que, si estas llorando seguro que es por ellos, y eso los hace dudar porque ellos recién llegan, aun no entraron y hacen llegar

(le responde)

Ahí Rubén te averiguo, no llores así

¿Ustedes de que crisis son?

Me imaginaba, ya tardaban en llegarse, los esperábamos para más temprano hoy

(A Rubén)

Rubén, te está buscando acá la crisis económica del país

(Le hablan por teléfono. Le habla al teléfono)

-¿Cómo? Perdón. Ah sí sí, es la crisis económica del país.  Si, le digo

(A la puerta) Acá la crisis del 23 que dice que la admira crisis económica del país, que usted es la mejor crisis que conocieron, que es el Maradona de las crisis. El Erik Cantona de las crisis. Quiere que le dé un autógrafo

(la habla la crisis económica del país)

Si, le digo

(la habla a la crisis del 23)

-Dice que apenas entra me deja un autógrafo para ustedes

(le vuelve a sonar el teléfono)

-Esperen que me volvió a sonar el teléfono

-Hola ¿Usted de nuevo? Si usted está resuelto ya, con el psicólogo… bueno bueno. No, no lo estoy ninguneando. Si. No tengo problemas con su manera de ser. Si, respeto su trabajo. Bueno, espero que le digo

(Al esposo)

-Gordo, además de todas las crisis que te buscan, te busca de nuevo la crisis de identidad ¿Qué le digo?

(El esposo le habla, ella habla con el esposo)

-Noo Gordo, atendela, es tu crisis de identidad, siempre vos con problemas con tu manera de ser gordo

(Golpean la puerta. Ella a la puerta)

-Ya vaaaaa, ya vaaaaa

(A los teléfonos)

Ya los atiende

(A su esposo)

-Gordo, te buscan todas las crisis acá ¿Seguís llorando? ¿Gordo seguir llorando? ¿Y ahora porque lloras? ¿Por qué crisis? Si no entró todavía ninguna hoy

(le hablan por la ventana, les dice a todos)

-Perdón, déjenme escuchar, cállense un poco que me están hablando por la ventana

(A la ventana)

-Siiii ¿Qué pasa? ¿A quién busca?  Claro, A Rubén, si si ¿Usted es?

(Al esposo)

-Te buscan también acá en la ventana la crisis de esta familia con la crisis de tu clan completo que vinieron todos juntos

(Al teléfono primero, a la puerta después, a la ventana después, a todos juntos)

-Ya los atiende, es que está llorando, está en una crisis

(Ahora a la puerta)

-No no, no es otra crisis económica que vino antes. No, si es la crisis del peso, ni las crisis de las inversiones que se van del país

(A su esposo)

-Gordo ¿Vos seguís llorando? ¿Cuánto vas a llorar? Ya hace como veinte minutos que te escucho llorar

(A todos)

Si, sigue llorando

(al esposo)

-¿Por qué seguir llorando? ¿Por qué lloras?

(Va hasta la pieza casi, aun a la vista habla con la pieza)

-¿Por qué lloras? ¿Por eso? ¿Por esa cosa lloras? Gordo, están todas las crisis que vienen acá esperándote y vos lloras porque nombre al Coco Basile. Todos pensando que vos estabas llorando por alguna crisis y estabas llorando de alegría ¿Y qué estás haciendo? ¿estas mirando videos de Racing campeón con el Coco Basile? ¿Por eso lloras? ¿Estás pasando un momento de alegría? Sos un pelotudo gordo, sos un pelotudo, yo teniéndote todas las crisis, y vos pasando un buen momento

(El esposo trata de convencerla)

-No no, no se puede, sos un pelotudo gordo, sos un flor de pelotudo ¿Y ahora que hacemos con todo esto? Noooo. Ya te dejo entrar a todas las crisis, no te agarro más a ninguna

(Se enoja, le grita al esposo)

Preparate porque te entran todas juntas como todos los días, prepárate Sacanti porque te agarran al medio y te parten todas

(El hombre le habla)

-Decile al Coco Basile que te ayude, y deja de llorar como un pelotudo de alegría. No se llora de alegría, se llora de angustia, como se debe ¿Sabes cómo se llora pelotudo? Se llora de desesperación, se llora porque no se puede hacer nada para que las cosas anden mejor. Se llora porque este país de mierda se cae a pedazos. Se llora porque te mete en líos aumentos de precio por el culo. Así se llora. Se llora porque en esta familia del orto siempre anda todo para atrás ¿Sabes cómo se llora grandísimo pelotudo? Se llora porque ya viene este año de mierda 2023 y todavía no se arregló nada. Se llora porque todos los hombres que sume a mi vida son como vos, unos grandísimos pelotudos. Se llora porque te miras al esposo y ya no sos la misma y se te cae el culo y las tetas y nadie te quiere coger y mucho menos vos la concha de tu madre. Se llora (dice esto llorando. Hace una pausa, retoma, le dice) Así se llora, hijo de puta, de dolor. Ahora como le digo a todas estas crisis que vos estas llorando de alegría si vinieron todas para acá a hacerte llorar de dolor, de angustia, de la puta desesperación del orto que nada sale nunca bien acá y la recalcada concha de su reputa madre

(le quiere hablar a las crisis)

 Hola, les quiero perdir disculpa, pero el pelotudo que vinieron a buscar no los va a poder atender, no va a poder entristecerse ni desesperarse con ustedes, ni hacer todo mal, ni sentirse presionado como si diez cocodrilos le ladraran en la espalda y se los comieran los tiburones del destino, porque el grandísimo pelotudo pueden creerlo, está feliz, está contento, está contenido. Y cuando alguien está bien no puede estar mal. Así que no está en condiciones de recibirlos, porque no está en una crisis, está en una alegría, aunque no lo puedan creer.

(No le responde nadie)

Hola, perdón hay alguien ¿perdón?

(Se da cuenta que no hay nadie en el teléfono, va hasta la puerta)

-Hola ¿hay alguien ahí? Perdón ¿Hay alguien ahí?

(Se da cuenta que no hay nadie en la puerta. Va hasta la ventana)

-¿Están ahí ustedes? Holaaaaaaaaaa

(No le responde nadie, se da cuenta que se quedó sola, se sienta, se seca las lágrimas, piensa, se dice a si misma)

-No me responde nadie. Lo que faltaba que ahora ni las crisis nos quieren. Puede ser que también tratamos mal a las crisis. Se fueron porque este estaba en babia cuando vinieron. El único tipo que se le ocurre esperar a las crisis contento. Para para. Hoy es el primer día del año. Claro. Si habíamos hablado esto con él, ayer. Es que es tanto siempre, se me pasan cosas. Él había dicho que iba a esperar a todas las crisis feliz, que esta vez era a mal tiempo buen cara. Claro, si es la estrategia que hablo con el psicólogo. Donde hay paz no hay crisis. Claro, si. Claro. Y si. Claro, si. Claro, y si. Y claro. Si. Y claro. Y si (hace largos silencios y se va hablando a si misma) Que silencio… que vacío… se fueron todas las crisis…Ahora porque yo me siento tan abrumada y tan triste, y tan desesperada… Para para para para, las crisis no se fueron, entraron… (mira para todos lados) Estas hijas de puta son como alimañas, no se fueron (mira para todos lados) Pero no le fueron al gordo, fueron a otro lado, porque él está inmunizado por la alegría… (hace silencio unos segundos hasta que se da cuenta) Vinieron a mí, entraron en mí. Tengo todas las crisis juntas adentro mío… Y después piden que de mi mejor versión. No son las mejores condiciones para dar la mejor versión…

(se levanta, abre la puerta, abre la ventana)

Se van todasssss de miiiii, todasssss de miiii se vannnn yaaaaaaa

(se queda en silencio)

Ahora me siento peor. No se van de mí, me agarran cada vez mas

(ve venir a su hijo más chico, se le ilumina la cara)

-Costitas, como estas chiquito ¿Te levantaste? Parate que te hago la leche

(Hace unos pasos y siente algo en el cuerpo, se frena, se dice a si misma)

-Esperen, ahí está Costitas y lo vi y se me fue todo. Eso, él es mi alegría, Costitas me saca las crisis de encima… O sea, Costas… O sea, a mí también me salva Racing… de algún modo (se toca, se tantea, se mira adentro) nada, ni unja angustia, no están las crisis, se fueron

(cuando está por salir de escenario la llaman por teléfono, vuelve y atiende del teléfono que había dejado arriba de la mesa)

-Hola , si, no me diga nada ¿La crisis del 23? Que que quiere usted, ya no la vamos a atender acá . aja, aja aja aja ¿De qué me interesa saber que están con todas las crisis juntas? Que les aproveche ¿Un gremio de crisis? Están armando un gremio de crisis. Suerte con su gremio…Ya les Rubén no los puede atender, está viendo partidos del Racing de Basile, está feliz… No hay crisis ya para él…¿Perdón? ¿No era él el Rubén que buscaban? Rubén… Rubencito ¿Perdón? Mi bebe, el del medio, si, el del medio, nuestro hijo del medio se llama Rubén, si si, es así ¿Perdón? ¿Cómo lo buscan a él si es chiquito, no tiene edad para crisis, la crisis es de adultos querido… No no, el Rubén grande vaya y pase. Pero el no. Con mi hijo no. No las voy a dejar pasar acá. No vengan porque a partir de ahora a esta casa no entra una sola crisis más ¿Me escucharon? Np entra una sola crisis mas ¿Me escucharon? Cortaron… Están viniendo para acá de nuevo

(se frena, espera, arranca de nuevo)

Costitas, llama a Olaran y Sacanti, tráelos todos, vamos a ver todos ,los videos de Racing del Coco Basile

(le grita a su esposo)

Gordo, hace lugar que vamos todos para allá a pasarla bien mirando los videos de Racing del Coco Basile. Traigan chocolate, llamen a la abuela que nos hace sentir bien, que venga también ella. A partir de ahora chicos, gordo, la pasamos bien, hacemos todas cosas que nos hagan bien, nos tratamos bien y nos regalamos cosas, nos damos todos los gustos y nos cumplimos todos los deseos. Y chicos, me dicen lo que quiere ser cada uno en la vida porque lo vamos a ayudar a serlo. A partir de ahora en esta casa se cumplen todos los sueños, y con alegría, sin dramas, que a esta casa no entra una crisis más. Así me tienen las crisis. Vamos chicos, a ver el Racing del coco

(se va para la pieza de su esposo gritando Basile)

-Basile Basile, Basile Basile. Vamoooo vamooo Cocoooo. Vamoo vamooo coco. Racing Racing Racing Racing