Funciones de terceros

domingo, 11 de diciembre de 2022

El viaje de una perspectiva. Viejas rutas, los agujeros de gusano del alfabeto. Capitulo 4

 

Habló por teléfono con su hermano, hablaron de su problema en el pie, de su economía siempre agujereada, siempre herida, siempre con la sangre cayendo y los tiburones del fracaso comiéndola. Entre esas cosas le contó de un amigo que estaba en problemas y en este momento no podía caminar, cosa que se iba a arreglar pronto. No supo que pasó, su cuerpo, su aura de sanador. Su arte funcionaba solo, como si él fuese una máquina que está todo el tiempo prendida, bombeando salud para afuera. Cortó, fue a comprar sal gruesa y sal fina para su pie y apenas tomó la calle, notó su cuerpo tomado por algo, que hizo que le costara caminar, se bambaleaba para un lado. Justo, lo que le pasaba a su amigo. Se dio cuenta que había tomado con su aura parte del daño de su amigo. Pensó como era que, hacia eso, ya no era como un pato, sino como una araña, de las buenas, o como el hombre araña. Conectó con su tercer ojo, vio a su amigo sentado en su cocina tratando de trabajar, preocupado, su mamá poniendo ropa en el tender en el patio. De su mente de la nada, había salido un agujero de tiempo y espacio largo como un chorro que había llegado hasta la casa de su amigo, había entrado en esa realidad, y ahí como una succionadora, había chupado un poco del daño de esa aura, que estaba depositado a la izquierda de él, entre el ojo y la cien y era lo que lo tiraba al piso. Había caminado una cuadra chupando ese daño, y después por el mismo agujero se había metido la voz de la mama del amigo y le había ducho con la dulzura que tiene, corta, deja que nosotros nos ocupamos, vos descansa querido, y con eso había cortado. El largo agujero de tiempo y espacio había retrocedido hacia él y había cerrado esa brecha. Así que a veces viajaba como un pato, a veces viajaba como un tentáculo, un tentáculo luminoso que se metía en realidades ajenas y las ayudaba. Había pensado, no le pasaba eso acaso a Sócrates, el Sócrates de la mayeustica del esclavo, al que guiándolo le había hecho recordar cosas muy difíciles y descifrar teorías físicas casi imposibles ¿Cómo lo había logrado?  Con preguntas lo había metido en un agujero de gusano y lo había llevado hasta la respuesta. Que había viajado en la mente del esclavo desde el pasado hasta el presente, o desde el futuro hasta el presente, o desde la fuente hasta el afluente ¿O acaso no sabían que las letras que enchastran todo nuestro tiempo y espacio y son las que dominan nuestros presentes son agujeros de gusanos que significan cosas de la antigüedad y aun lo hacen? La a era una cabeza de vaca, el pictograma o símbolo de una cabeza de vaca, o acaso no contamos aun vacas cuando nombramos la a, era una cabeza de buey que giro con el tiempo. O un trípode de agua. La be era una tienda de campaña, o sea, una casa. Cuando nombramos la b traemos todas las casas del pasado. La c era un boomerang. La ce cuando la nombramos nos trae guerra, porque seguimos nombrando el bumerang cuando nombramos la c. Pero el secreto es la d, el punto de, viene del jeroglífico que significa puerta, pez. La puerta es un pez ¿No está claro? Seguida de la e, que viene de un tipo rezando. La ha significaba una verja, valla o muro, aunque se dio de baja, se siguió usando en las elites por una pose, se puede decir que la h es la letra más elitista. La jota era un junco. La k era la palma de una mano. La le era un bastón. La m viene de un jeroglífico de agua, la m significa agua. La n viene también del agua, o una víbora o anguila. La o, claro, era un ojo. Ahora, cuando volvemos a nombrar todo el tiempo las letras que vienen de estos iconos, y que aun los representan ¿No piensan que abrimos para todos lados agujeros de tiempo y espacio y que volvemos a esos tiempos o traemos esos tiempos hacia acá? Y como en el futuro se comunican del mismo modo, lo que sucede es que ellos abren brechas de tiempo y espacio, o sea, que podeos ir hasta allá a través del idioma. Su conclusión  final fue esta: El no fabricaba los agujeros, los agujeros estaban, el solo usaba rutas que estaban metidas en el aire y en el tiempo, a través del alfabeto entre otras miles de cosas. O que el tiempo no existe porque la realidad es un gran agujero de gusano que en realidad es todo. O sea, que todo es todo, todo el tiempo y todo lugar, y eso había que darse cuenta. O sea, hacer una mayéutica, como la mayéutica de Sócrates. O sea, que no éramos en la caverna de Platón, somos la caverna de Platón

No hay comentarios.:

Publicar un comentario