Marcelo Di marco y Por dónde empezar a corregir

 

En la página 47, y en adelante, Marcelo Di marco propone como y por donde corregir los textos escritos en un rapto de inspiración. Empieza diciendo:

“Cuando uno está embalado escribiendo se olvida hasta de cómo se llama… Entra por el agujero de papel que Stephen King celebra en Misery…”

Con esto Marcelo Di marco celebra lo que es la escritura en rapto de inspiración, o en técnica libre de las que presenta Julia Cameron. Pero terminado ese momento propone concentrarse en corregir. Lo propone de esta manera “…Pero no hay que desperdiciar ese material, ese magma insospechado… Cuando llegue el momento de corregir rastrillaremos sin apuro…” Y para eso hace una propuesta muy interesante. Él dice; “…Debemos detenernos…” Casi al final de la página 43 plantea de manera tan clara e inevitable de considerar “…Debemos  detenernos para que el lector no se detenga a pensar que habremos querido decir realmente…”

Enseguida de eso cita al poeta Horacio “El poeta Horacio tiene una imagen muy gráfica para burlarse de los colegas precipitados. Cuando describe a Lucilo dictando versos lo muestra Stans pede in uno (apoyado en un solo pie) ...”

Después de esto nos propone perfeccionar nuestro estilo, tomarnos un segundo, darnos tiempos como escritores que podemos editar: “Afirmémonos en nuestros dos pies, con el rastrillo en la mano. Detengámonos, para el bien del dinamismo…” Y vuelve a citar a un escritor, Jean de la Bruyére, de hace 300 años: “Un buen autor, que escribe con cuidado, descubre a menudo, aquella frase que buscaba desde hacía largo tiempo sin dar con ella”

Casi al final de la página propone sobre el estilo “…el mejor estilo es aquel que expresa las ideas con las palabras justas…” Y ya al final de la página siguiente da la pista sobre la falencia que va a tratar de trabajar, casi una falencia de la vida, la búsqueda de lo grandilocuente “…Tendemos a escribir con estilo ajeno, grandilocuente…”

Esto da pie al ejercicio que va a proponer en el punto 26 “Por dónde empezar a corregir”

Empiezan proponiendo tomen un texto que hayan escrito, alguna página que quieran corregir. Y empieza su lista de acciones para hacer: “. Subrayen donde les parezca que el sentido está expresado con pomposidad, con esa falsa ostentación que se suele considerar –Artística-. Marquen todos los adjetivos. Verifiquen si cada uno de ellos le agrega algo a su sustantivo. Subrayen palabras repetidas, y vean si la repetición es pertinente. Traduzcan las ideas en términos claros y precisos. Comparen la primera versión con la versión final, para verificar si en esta se han dicho todo lo que se habían propuesto decir”

Después esto propone comprar los dos textos y concluye diciendo “Seamos concisos. Siempre”